En los primeros textos que se han hecho públicos del libro “Things I Should Have Said”, Jamie Lynn Spears revela que sus papás la presionaron para que abortara cuando quedó embarazada a los 16 y le prohibieron que le contara a Britney lo que estaba pasando.
El anuncio de que la hermana menor de Britney Spears había escrito sus memorias puso en pie de guerra a los fans de la princesa del pop, que creían que aprovecharía la ocasión para revelar detalles íntimos de la vida y la tutela legal de la artista, pero los primeros fragmentos del libro muestran que la autora se ha centrado en la relación con sus padres.
Jamie Lynn, reveló que todo su círculo de allegados, incluidos sus papás, la presionó duramente para que abortara cuando quedó embarazada siendo una adolescente.
Según cuenta, le quitaron su celular para que no pudiera comunicarse con nadie y le prohibieron que compartiera la noticia con Britney.
“La necesitaba más que nunca y ella no pudo ayudarme en mi momento más vulnerable. Hoy todavía siento el dolor de no haber podido decírselo a mi hermana”, escribió Jamie.
La estrella juvenil también reveló que fue su equipo quien organizó la exclusiva mediante la cual presentó al mundo a su bebé en la revista OK! y que tanto ella como su mamá se escondieron en una cabaña de Connecticut mientras esperaban a que se publicaran las fotos.
Allí fue donde pasaron juntas la fiesta Acción de Gracias de aquel año y Jamie aún recuerda que su mamá no hizo nada por disimular su decepción por la decisión que había tomado su hija menor de convertirse en mamá a los 16.