Cuando este domingo agentes de la policía de Houston entraron a un apartamento para hacer un control de bienestar se encontraron una perturbadora y trágica escena: dentro convivían en condiciones de precariedad tres menores solos y había un esqueleto de otro niño.
Ed González, sheriff del condado de Harris, en una rueda de prensa el domingo describió la situación como “muy horrible, muy trágica”.
Los menores abandonados tienen 15, 10 y 7 años, y “habían estado viviendo en condiciones deplorables durante bastante tiempo”, refirió González.
Los niños mostraban signos de desnutrición y fueron trasladados al hospital para ser tratados.
“Llevo mucho tiempo en este negocio y nunca había oído hablar de un escenario como éste. Realmente me tomó por sorpresa”, dijo el funcionario. “Se nos rompe el corazón por esos tres chicos”.
De acuerdo con lo expuesto por González a los periodistas, fue el mayor de los hermanos quien llamó al 911 para reportar la situación.
Aparentemente, el chico le contó a los oficiales que lo atendieron que su hermano de 9 años había estado muerto durante un año en el apartamento que compartía con sus otros hermanos.
También les dijo que padres no habían vivido en el apartamento con él y sus dos hermanos vivos durante varios meses.
“Parece que estuvieron allí mientras el cuerpo se deterioraba”, dijo González en la rueda de prensa.
El sherrif refirió que “básicamente se estaban cuidando el uno al otro y el mayor estaba haciendo lo mejor que podía para cuidar de los otros”.
A última hora de la noche del domingo, la oficina del sheriff dijo que la madre de los menores y su novio habían sido encontrados y estaban siendo interrogados.