Un terrible crimen tuvo lugar en un apartamento en el Valle de San Joaquín, California, el pasado miércoles, en el que tres niños menores de nueve años fueron encontrados muertos, aparentemente a manos de su madre quien se encontraba herida en un supuesto intento de suicidio.
La Oficina del Sheriff del Condado de Merced detalló que los agentes fueron llamados a la residencia para realizar un control de bienestar en el día mencionado. Al arribar, encontraron a los tres niños fallecidos y a su madre, apenas con vida y sufriendo “lo que parecían ser heridas auto-infligidas”.
Los niños han sido identificados como Anna Ortiz Lara, de 8 años, Matteo Ortiz Lara, de 5 años, y Alexa Ortiz Lara, de 3 años. Mientras que su madre y presunta asesina es Patricia Ortiz, de 31 años.
De acuerdo con la Oficina del Sheriff, luego de matar a sus hijos, Patricia intentó quitarse la vida, pero fue auxiliada por los agentes y fue llevada a un hospital local. La mujer “será transportada a la Cárcel del Condado de Merced y fichada por tres cargos de asesinato”, añade.
Las autoridades no han informado el estado de salud actual de la madre y tampoco hay detalles de la causa y la forma en la que murieron los menores, debido a que la investigación está en curso.
El Merced Sun-Star relata que la policía llegó al lugar y encontró a una persona afuera que gritaba pidiendo ayuda. Una vecina que mantuvo el anonimato por temor a su seguridad le dijo al periódico que escuchó al esposo de Ortiz gritar pidiendo ayuda ese mismo día.
“Ayúdenme, mis hijos”, supuestamente gritó el hombre.
“El esposo se estaba volviendo loco”, dijo. “Un señor estaba ayudando a Ortiz mientras ella estaba en la tina. Se había cortado las venas y estaba sangrando. Un tipo la estaba ayudando tratando de asegurarse de que estaba viva”, relató la vecina que habría entrado al apartamento tras el crimen.
Asimismo, relató que la apariencia de los cadáveres sugería que los niños habían estado muertos durante horas cuando fueron encontrados. “Sus labios ya estaban azules”, añadió.
La vecina sugiere que el fin del matrimonio entre la acusada y su esposo el verano pasado había resultado en un deterioro visible de la salud mental en los últimos meses, dejando a Ortiz“angustiada”.