Dos mujeres que viven juntas en Vancouver Island, provincia canadiense de Columbia Británica, no han podido desempacar una licuadora desde que la compraron en el pasado Black Friday, debido a que sus tres gatos se apropiaron de la caja con el electrodoméstico.
Se trata de una licuadora de marca Vitamix de un costo aproximado de $400 dólares, que sus dueñas, Jessica Gerson-Neeves y su esposa, Nikii, pidieron por internet, luego de encontrar una buena oferta; sin embargo, no tenían en cuenta que sus felinos se adueñarían del equipo y no les permitirían, ni si quiera, desempacarlo.
“Somos las sirvientes devotas de un trío de gatos que se llaman Max; George, Destructor de Mundos; y Lando Calrissian. Apenas unos segundos después de dejar la caja de Vitamix, en los momentos previos a que la abriéramos y felizmente pusiéramos en uso nuestra nueva y emocionante licuadora, Max (también conocido como el balón de fútbol sensible) vio la caja y, asumiendo que era para él, saltó justo encima”, escribió Jessica, en su cuenta de Facebook.
Desde entonces, dijo Jessica, la caja de Vitamix ha estado ocupada por al menos uno y, a veces, dos gatos a la vez.
“Con tres gatos y solo dos humanos en el hogar, los humanos son superados en número y (al ser unos tontos gigantes), ambos tienen miedo y no están dispuestos a reubicar a la fuerza a los gatos infractores”, afirmó Jessica.
Primero publicó la saga en un grupo de Facebook y, después de que más de un millón de personas mostraran interés, documentó fielmente lo que ocurría en la propia página de redes sociales de los gatos.
Una de las publicaciones más recientes involucra un video que muestra un cambio de turno, donde el trío de gatos se asegura de que la caja de Vitamix nunca quede desatendida.
“¿Existe, (no puedo creer que esté preguntando esto honestamente), alguna posibilidad de que todos estén dispuestos a enviarnos tres (el número es muy importante, ya que hay tres gatos y necesitamos que haya uno más para que podamos espero sacar la licuadora real de la caja) ¿cajas vacías de Vitamix?” preguntó Jessica.
“Otras cajas de cartón parecen carecer del atractivo de la caja de Vitamix, y dado que, al igual que sus maravillosas licuadoras, este enfrentamiento parece estar diseñado para durar, tememos que esta pueda ser nuestra única forma de salir de la situación en que nos encontramos”, agregó.
Y el 4 de enero, la petición de la pareja fue respondida cuando Vitamix envió tres cajas vacías. La primera de las tres cajas llegó solo tres días después, pero lamentablemente, como describió Jessica en Facebook, los gatos no se dejaron engañar.
Hasta el día de hoy, el problema no se ha resuelto.