Después de un año y medio de noviazgo, la pareja conformada por Megan Fox y Machine Gun Kelly se comprometieron el pasado 11 de enero en Puerto Rico, bajo el mismo árbol donde se declararon por primera vez su amor mutuo.
“De alguna manera, un año y medio más tarde, después de haber atravesado juntos el infierno y de habernos reído más de lo que nunca imaginé posible, me pidió que me casara con él”, compartió emocionada la actriz junto a un video donde explicó que ambos bebieron la sangre del otro a modo de sellar el compromiso.
MGK le entregó a Fox un anillo de compromiso único y muy significativo para ambos, diseñado por el joyero Stephen Webster, según reveló en una publicación, que incluye sus respectivas piedras de nacimiento, la esmeralda por ella y el diamante por él, para formar un corazón, sin embargo, su creatividad pudo ir más allá.
El músico ofreció más detalles de la sortija y, además, de explicar que pensó en cómo se vería, también pensó cómo se sentiría el anillo en la mano de Fox. Y es que según declaró, se aseguró de que la banda incluyera unos pequeños pinchos para que arañen el dedo de la actriz cada vez que intente quitárselo.
“El concepto es que el anillo puede separarse para hacer dos anillos diferentes. Cuando se juntan, se mantienen unidos por un imán. Forman un oscuro corazón. ¿Y ves esto de aquí? Las bandas son en realidad espinas. Así que si intenta quitárselo, le duele”, explicó Colson Baker, como se llama realmente el cantante.
Esta peculiar idea se basa en el concepto de que “el amor duele”, en el que ambos creen firmemente, y se ajusta además a la perfección a la forma en que ellos eligieron sellar su compromiso: bebiendo su sangre.