“El increíble Hulk”, segunda entrega de Marvel, está más que olvidada. Eso puede deberse a varios motivos, tanto al hecho de que no funcionó bien en taquilla como porque fue la única película en la que Edward Norton dio vida a “Bruce Banner”.
De hecho, la salida de Norton no fue precisamente amistosa. En un primer momento se anunció a través de un comunicado de Kevin Feige que destacaba que no había una motivación económica, sino en “la necesidad de un actor que personifique la creatividad y el espíritu colaborativo” del resto del equipo.
El problema fue que Norton quería implicarse demasiado en la toma de decisiones, pues en “El increíble Hulk” reescribió el guion original porque, según él mismo, “pensé que debíamos intentar hacer una película de Marvel que fuera tan buena como la peor de Christopher Nolan”. En el estudio probablemente temían que pasara lo mismo con “Los Vengadores”, pero lo cierto es que quizá tardaron más de la cuenta en tomar la decisión.
Poco después del polémico comunicado de Feige, Brian Swardstrom, agente de Norton por aquel entonces, calificó de poco profesional la actitud de Feige, comentando además lo siguiente.
“El ofensivo comunicado de Kevin Feige es un intento deliberadamente engañoso e inapropiado de describir a nuestro cliente de forma negativa. Al contrario de lo que Kevin daba a entender, Edward estaba deseando trabajar con Joss Whedon y los otros actores del reparto de ‘Los Vengadores’, ya que además es amigo personal de muchos de ellos”.
Swardstrom también destacó que Norton ya había mantenido “charlas no conflictivas” y que el tema monetario sí que había influido en esa decisión. Teniendo en cuenta que ese había sido el motivo para que el estudio prescindiera de Terrence Howard y que fichase a Don Cheadle para sustituirlo en “Iron Man 2” por un salario bastante inferior.
Lo que sí parece claro es que en Marvel llevaban tiempo manejando la idea de prescindir de Norton, pues ni siquiera un mes pasó hasta que se anunció que Mark Ruffalo sería su sustituto como “Hulk”.