Leon Atkinson de Wigan, de 41 años, y Reino Unido, fue capturado por la policía de Reino Unido gracias a que el propio narco envió a un “colega” una fotografía donde se le puede ver posando con cerveza en mano desde el jardín de su casa.
El jefe de una de las organizaciones más grandes de aquel país es conocido por haber liderado un grupo de traficantes que en solo tres meses transfirió más de nueve millones de dólares de manera ilícita.
Desde entonces la policía se encargó de buscarlo por cielo, mar y tierra, pero su identidad era desconocida por ellos y por meses supieron que usaba varios apodos, como: ‘Carrothorn/Maidenbear’, ‘Mistersmallhead’, ‘Festiveape’ y ‘Shaggyfarmer’.
Fue gracias a que los detectives rastrearon miles de líneas de chats enviadas entre cuatro miembros del grupo en la red de comunicaciones encriptadas EncroChat y gracias al código Venetic, operación policial más grande jamás realizada en el Reino Unido, que se logró su captura.
En los mensajes se reveló cómo los hombres organizaban la compra, así como el transporte de grandes cantidades de cocaína con Abdul Ghafar, de 46 años, directamente involucrado en la transferencia de una gran cantidad de dinero, y los distribuidores Adam Marsden, de 37 años, y Nathan Powell, de 31, obteniendo y suministrando medicamentos de clase A entre ellos.
Además, la policía logró rastrear una imagen donde se puede ver a Atkinson enfundado de rojo, bebiendo cerveza en el jardín de su casa durante el confinamiento por el coronavirus, que fue enviada desde su celular a otro líder de otra banda de narcotraficantes.
“Esta era una banda de narcotraficantes extremadamente sofisticada que distribuía de manera efectiva grandes cantidades de cocaína en todo North West. No tenían vergüenza de beneficiarse por inundar comunidades no sólo con sustancias ilícitas, sino también con la miseria, la violencia y las carencias que conlleva”, dijo Roger Smethurst, detective inspector del Grupo contra la Delincuencia Organizada de la Policía de Greater Manchester a través de un comunicado.
Asimismo, señaló que nadie se salva de la policía: “Está claro que ningún criminal es intocable y ningún individuo sin escrúpulos está a salvo de ser detectado”.
Se sabe que Atkinson hizo negocios con Romiz Ahmed, de 39 años, quien fue condenado a seis años de cárcel por lavar al menos dos millones de dólares en nombre de la organización.
Atkinson fue sentenciado a 15 años de prisión, Marsden a nueve años y ocho meses de cárcel, y Ghafar a ocho años y ocho meses. Nathan Powell, de 31 años, también se declaró culpable y está en espera de ser encarcelado.
