Conducir con los vidrios empañados o cubiertos de escarcha no solo es incómodo, también es peligroso. La visibilidad es clave para la seguridad, por eso aquí tienes un paso a paso detallado para despejar tus cristales de forma rápida y efectiva:
1. Enciende el desempañador delantero y trasero: activa la ventilación del auto en modo desempañador. El aire caliente ayuda a equilibrar la temperatura entre el interior y el exterior, disolviendo el vaho acumulado en los vidrios.
2. Ajusta la temperatura gradualmente: evita subir el calor al máximo de golpe, ya que el choque térmico puede dañar los cristales. Lo ideal es aumentar el calor poco a poco hasta que notes que la neblina comienza a disiparse.
3. Usa el aire acondicionado: aunque parezca contradictorio en clima frío, el aire acondicionado seca el aire interno, eliminando la humedad que genera el empañamiento.
4. Ventila el auto: abre un poco las ventanas por unos segundos para permitir que circule el aire y se equilibre la humedad.

5. Rocía descongelante en los vidrios: si hay escarcha, utiliza un producto comercial o una mezcla casera de agua y vinagre (3:1) para derretirla rápidamente sin dañar el vidrio.
6. Utiliza el limpiaparabrisas y un paño de microfibra: pasa los limpiadores para retirar restos de agua o hielo, y seca el interior con un paño limpio para evitar nuevas marcas.
Con estos pasos, no solo tendrás una visibilidad clara, sino también un trayecto más seguro y tranquilo. Mantener los vidrios libres de humedad es cuidar de ti y de quienes te acompañan en el camino.