La reconocida cantante mexicana Paulina Rubio ha sido recientemente el centro de atención mediática a raíz de reportes que señalaban un supuesto desalojo de su mansión en Miami, Estados Unidos. Esta información, que apuntaba a problemas económicos derivados de deudas y costosos procesos legales, ha generado diversas reacciones y desmentidos por parte del entorno de la artista.
Los rumores iniciales, difundidos por la prensa de espectáculos, indicaban que la intérprete de éxitos como “Ni una sola palabra” habría enfrentado complicaciones financieras relacionadas con el pago de la hipoteca de su residencia y los honorarios de los abogados en sus batallas legales por la custodia de sus hijos, fruto de sus relaciones con Nicolás Vallejo-Nájera, “Colate”, y Gerardo Bazúa. Incluso, se mencionó que los abogados podrían haberse quedado con gran parte de su patrimonio a causa de estos pleitos.
Sin embargo, en las horas siguientes a la publicación de la noticia, una fuente cercana a Paulina Rubio desmintió categóricamente el desalojo a la revista ¡HOLA!. De acuerdo con la información, la cantante habría asegurado que “todo es mentira” y que, si bien es cierto que ya no reside en esa propiedad, no ha sido expulsada de ningún lugar. La misma fuente reveló que la situación ha generado molestia en la artista, quien prefiere enfocarse en su trabajo y en el bienestar de sus hijos, a quienes considera su principal prioridad.
Por su parte, el empresario Óscar Madrazo, amigo cercano de la “Chica Dorada”, aunque inicialmente habría sugerido problemas económicos, posteriormente desmintió haber confirmado el desalojo, manifestando su enfado por la tergiversación de sus palabras. Madrazo solo reconoció que la cantante ha atravesado “muchas cosas difíciles” este año, sin detallar la situación de la vivienda.
La residencia en cuestión se encuentra ubicada en una zona exclusiva de las Venetian Islands, con impresionantes vistas a la bahía. A pesar de la ola de especulaciones, la cantante ha optado por mantener un perfil bajo respecto al tema, evitando hacer declaraciones públicas, mientras su entorno cercano reitera que los reportes de desalojo por deudas son falsos.
