El famoso personaje de las manifestaciones, que no tiene pelos en la lengua para decirle las verdades al Gobierno de turno, hace fuertes declaraciones sobre su vida íntima.
Norma Galicia, esa mujer alegre, carismática, pero de carácter fuerte, tiene una conmovedora historia que decidió compartir.
“Mi infancia fue muy pobre, mis padres fueron muy trabajadores, nos daban lo que podían. Mi papá es albañil y mi mamá vendiendo tortillas. Yo salí adelante, lavando carros y vendiendo tortillas. Me vi obligada a escapar a los 13 años de mi casa, y a esa edad me violaron, me quedaba aquí en las bancas del parque central. Yo sufrí discriminación con mis hermanas. Me intentaron matar varias veces por una prostitución. Uno de prostituta no vale nada. La vida y la calle es la mejor universidad que hay. Uno tiene que vender su cuerpo por una tortilla. Uno de mujer es astuto, me busqué un viejo con dinero y me sirvió de escalera, él me ayudó a salir. Logré colocar mi negoció y logré sobresalir como ahora. Hoy un mi hijo ya está en la universidad y otro en tercero básico. Siempre apoyo a la gente por la injusticia que se comete a diario contra ellos. Tanto gobierno corrupto, por eso me di a la tarea de dar a conocer los derechos”, contó la famosa Pirulina.
Agregó que su sobrenombre se lo colocó un grupo de vendedores y a ella le gustó. Afirmó que tiene 25 años de tener el apodo.
Dijo que le gusta la política, pero que no está de a acuerdo a regalar láminas. “Si la gente quiere algo, que se lo ganen”, aseguró.