El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el domingo que el autócrata Vladimir Putin tiene razón al decir que las relaciones están en su punto más bajo en años, aunque sugirió que Rusia podría ser más débil de lo que parece y que Moscú se extralimitó en Oriente Medio.
Biden utilizó la cumbre del G7 en el balneario inglés de Carbis Bay para argumentar que las democracias más ricas del mundo se enfrentan ahora una competencia existencial con los autócratas que definirá el siglo XXI.
Biden, quien calificó de asesino al ex espía de la KGB en marzo, dijo que Rusia muestra un comportamiento inaceptable en varios frentes, pero también señaló los propios dilemas de Rusia: su colapso económico postsoviético, lo que llamó como su extralimitación en Siria y sus problemas con el COVID-19.
Cuando se le preguntó por qué Putin no ha cambiado pese a años de sanciones de occidentales, Biden bromeó: “Él es Vladimir Putin. Los autócratas tienen un poder enorme y no tienen que responder a un público, y el hecho es que si yo respondo de la misma manera, como lo haré, puede ser que eso no lo disuada, él quiere seguir adelante”, afirmó Biden.