Johansson, que ha presentado la querella en un tribunal de Los Ángeles, señala el acuerdo que alcanzó con Disney para el rodaje del filme garantizaba un estreno exclusivamente en cines y que su salario estaba basado en buena parte en los beneficios de taquilla de la película.
La actriz de “Black Widow” apunta que había una promesa por parte de Marvel de que la película tendría un lanzamiento exclusivo en los cines. “Disney era muy consciente de esta promesa, pero aun así dio instrucciones a Marvel para violar su compromiso y, en lugar de eso, lanzar la película en Disney+ el mismo día que llegó a los cines”, afirma la demanda.
“Disney intencionadamente indujo el incumplimiento de contrato de Marvel, sin justificación, con el objetivo de impedir que Johansson obtuviera los beneficios totales de su acuerdo con Marvel”, añade la denuncia.
Esta demanda de Johansson podría marcar tendencia en el mundo del entretenimiento en un momento en el que las principales compañías del sector están decantándose por los servicios de emisión en continuo con el objetivo de lograr un mayor crecimiento. Este movimiento implica importantes cambios para los actores y productores, que por su parte quieren asegurarse de que el desarrollo de las plataformas digitales no se produce a sus expensas.