Después de un tiempo lejos de los reflectores del boxeo profesional, el “Senador” filipino, Manny Pacquiao, se calza nuevamente los guantes para un combate. Su rival no es cualquier contrincante, se enfrentará al actual campeón mundial de peso wélter del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Mario “El Azteca” Barrios. Este duelo no es solo una exhibición, es una pelea oficial por un título mundial, lo que le da un sabor especial y muchísima más emoción a este regreso.
La trayectoria de Manny Pacquiao es algo que lo coloca en un pedestal dentro de la historia del boxeo. Es el único boxeador en la historia en ganar doce títulos mundiales en ocho divisiones de peso diferentes. Desde el peso mosca hasta el superwélter, “Pac-Man” ha dejado su huella, demostrando una versatilidad y una pegada que pocos han tenido. Ha sido campeón mundial de la CMB en peso mosca, campeón de la FIB en peso supergallo, campeón de The Ring en peso pluma, campeón de la CMB y The Ring en peso superpluma, campeón de la CMB en peso ligero, campeón de The Ring en peso superligero, campeón de la OMB en peso wélter (en tres ocasiones distintas), y campeón de la AMB (Super) en peso wélter, además de campeón de la CMB en peso superwélter. Una lista que hace temblar a cualquiera y que lo consolida como un verdadero fuera de serie.
A sus 46 años, muchos se preguntan si Pacquiao aún tiene lo necesario para competir al más alto nivel. Sin embargo, su disciplina y su pasión por el boxeo parecen intactas. En sus propias palabras, ha estado entrenando como si tuviera 26, y el fuego en sus ojos sigue ardiendo. Este regreso no es por dinero, dice, sino por dejar otra página escrita en la historia del boxeo y demostrar que la edad es solo un número cuando hay voluntad y talento. Será una noche llena de nostalgia para sus fans y una prueba definitiva para el legendario filipino.
Fuente consultada: Premier Boxing Champions (PBC), MGM Grand, Al Jazeera, Sporting News, Wikipedia.
