En una demostración de talento y estrategia, Verstappen, quien partió desde la primera posición de la parrilla, dominó la carrera de principio a fin. A pesar de la presión inicial de los pilotos de McLaren, Lando Norris y Oscar Piastri, el neerlandés mantuvo la compostura y gestionó su ritmo de manera impecable. La carrera se consolidó a su favor vuelta tras vuelta, cruzando la línea de meta con una ventaja considerable, un testimonio de su conducción magistral.
El podio lo completaron los dos monoplazas de McLaren, con Norris en segunda posición y Piastri en tercer lugar, no sin antes protagonizar una polémica interna por órdenes de equipo. Mientras tanto, los anfitriones de Ferrari tuvieron una jornada agridulce, con Charles Leclerc finalizando en la cuarta posición. Esta victoria representa el tercer triunfo del año para Verstappen y un golpe de autoridad en una temporada que había sido dominada por sus rivales. La próxima cita del campeonato será el Gran Premio de Azerbaiyán, donde se espera una nueva batalla en la pista