Britney Spears volvió a preocupar a sus seguidores tras una revelación impactante en redes sociales. En una reciente publicación en Instagram, la cantante confesó haber sufrido “daño cerebral”, producto “según ella” de los años que vivió bajo la estricta tutela legal de su padre. Además, explicó que los videos en los que aparece bailando son una forma de sanar y reconectarse con su cuerpo. “Sé que mis publicaciones bailando pueden parecer ridículas, pero me ayudaron a recordar cómo volar”, escribió.
La declaración llega justo cuando su exesposo, Kevin Federline, se prepara para lanzar sus memorias tituladas You Thought You Knew (“Creíste que lo sabías”), donde promete exponer detalles desconocidos de su relación con la estrella. En ese libro, Federline la acusa de haber tenido actitudes irresponsables como madre y de consumir sustancias durante el tiempo que estuvo bajo tutela.
Britney respondió con firmeza a esas acusaciones, señalando que el movimiento y la música fueron su refugio durante los momentos más oscuros: “Me quitaron las alas y tuve daño cerebral hace tiempo, cien por ciento. Pero he dejado atrás ese periodo y me siento afortunada de estar viva”.

Frente a las críticas, agregó: “Aunque esto suene tonto, estoy aportando sustancia entre toda la basura que se está diciendo de mí. Esas mentiras piadosas van directas al banco, y yo soy la única que realmente sale herida”.