En su nueva película para Netflix, el comediante interpreta a un ingenuo habitante de Salem que vela por la seguridad de sus vecinos en Noche de Brujas.
La sociedad entre Netflix y Adam Sandler, vía su productora Happy Madison, sigue firme y llega a la plataforma una nueva película del trato que iniciaron en 2014: “El Halloween de Hubie”. Una cinta, escrita y protagonizada por el actor, donde la comedia se viste de terror.
Su relato se centra en “Hubie Dubois” (Sandler), un maduro soltero que vive junto a su madre en Salem y realiza un trabajo de protección comunitaria, aunque sus vecinos no se lo hayan pedido. Labor que él refuerza especialmente cuando se celebra Noche de Brujas.
Sin embargo, lo más preocupante es que Hubie sufre de un miedo constante que lo hace presa fácil de varios habitantes del lugar, por no decir casi todos, quienes transformaron en su pasatiempo favorito el asustarlo y jugarle bromas pesadas.
Pero hay alguien que piensa que él es un héroe: “Violet Valentine” (Julie Bowen), compañera de escuela de “Hubie” y la más popular de la secundaria, que tras estar casada con el oficial de la policía “Steve Downey” (Kevin James) ahora se dedica a cuidar a sus hijos adoptivos.
Y es precisamente en la nueva celebración de Halloween que “Dubois” ejercerá con más convicción su autoimpuesta labor de “voluntario oficial” de seguridad, para que los habitantes de Salem respeten las reglas de convivencia y se mantengan a salvo.
Esto porque, como se ve en el inicio del relato de la cinta, un psicópata escapó del Hospital Psiquiátrico de Westford y, además, a la casa vecina de “Hubie” se mudó un amable, pero extraño hombre que se hace llamar “Walter Lambert” (Steve Buscemi).
Dos sospechosos personajes que se suman a un anochecer donde “Dubois” debe vigilar que todo esté en orden en el festejo de Noche de Brujas, que encabeza el alcalde, y que también los jóvenes de la fiesta en una granja vecina se diviertan manteniendo el decoro.
Las cosas empeoran cuando comienzan a desaparecer sus residentes -entre ellos el adolescente “Mike” (Karan Brar) y el matrimonio “Hennessey” (Maya Rudolph y Tim Meadows)-, y “Hubie” debe poner de lado sus miedos para encontrar al responsable.
Una labor en la que deberá asociarse con los miembros de la policía local, el Sargento “Downey” y su asistente “Blake” (Kenan Thompson), y hará uso del termo para sopa que lo acompaña desde que era niño, que también puede ser linterna, altavoz o destornillador.
Así, con esta mezcla de suspenso, humor y el constante abuso al que es sometido su protagonista, Sandler va dibujando, junto al realizador Steven Brill -director de varios de sus largometrajes- el simple paisaje de “El Halloween de Hubie”.
Una comedia sin ambiciones, pero con muchas situaciones absurdas, donde Sandler nuevamente hace uso de su gusto por los personajes más singulares -que el espectador no sabe si odiar o querer- y de chistes que hacen asomar algunas risas.
Y donde nuevamente recurre a la ayuda de sus amigos y colegas, entre ellos habituales colaboradores como James y Rudolph, y las apariciones de figuras como Ray Liotta y Shaquille O’Neal, para darle más atractivo a una película solo para sus incondicionales
