El pasado 22 de abril Giselle Blondet vivió uno de los días más felices de su vida con el nacimiento de su segundo nieto, Liam Gabriel. Y es que apenas una semana después de la llegada al mundo del bebé, la primogénita de Giselle, Andrea, sufrió un ataque al corazón mientras amamantaba al recién nacido.
La conductora, se animó a compartirlo este lunes con la intención de agradecer públicamente a todos los ángeles que se cruzaron en su camino en esos días tan dolorosos y que lograron salvarle la vida a su “mariposita”, como llama cariñosamente a su hija.
Giselle, que cuenta con 1 millón de seguidores solo en Instagram, reconoció que “fueron momentos bien duros” ya que la vida de su hija pendía de un hilo.
Afortunadamente, gracias a la rápida y acertada intervención de los médicos, la hija de Giselle logró sobreponerse a este duro golpe y hoy vive para contarlo.