En una nueva entrevista, el Duque de Sussex brindo más información sobre la familia Real, esta vez refriéndose a la reina Consorte a quien considera peligrosa porque trata de “rehabilitar su imagen”.
El príncipe Enrique brindó este domingo 8 de enero una entrevista en la que comentó por qué la prensa definía a Camila Parker Bowles como la “villana” y expresó que ella era “peligrosa” porque debía reivindicarse ante la sociedad para garantizar su ascenso en la monarquía.
Al retomar uno de los capítulos de su libro ‘Spare’, que este martes saldrá a la venta, el príncipe se refirió a Camila Parker, la actual esposa de su padre, el rey Carlos III, con quien se casó en 2005. “Era la tercera persona en su matrimonio anterior. Necesitaba rehabilitar su imagen”, afirmó Enrique y reconoció que junto con su hermano Guillermo le pidieron a su padre que no se casara con Camila.
“No pensábamos que fuese necesario. Pensábamos que iba a hacer más mal que bien”, dijo y agregó que “seguramente era suficiente con que estuvieran juntos”. “¿Por qué ir tan lejos cuando no es necesario?”, se preguntó.
Además, Enrique fue consultado sobre la campaña que Camila inició en la prensa británica en favor de su matrimonio y sobre por qué la consideraba “peligrosa”. “Por la necesidad que tenía de rehabilitar su imagen”, sostuvo y explicó que “eso la hacía peligrosa por las conexiones que estaba haciendo dentro de la prensa británica. Y ambas partes estaban dispuestas a intercambiar información. Y con una familia construida jerárquicamente y con ella en camino de ser la reina consorte, iba a haber personas o cuerpos en la calle por eso”, describió.
El príncipe considera que él mismo fue, con el paso de los años, una de esas víctimas y acusó a Camila y a su padre de haberlo utilizado en ocasiones, al igual que a su hermano, para tener una mejor cobertura en los medios.
En otro tramo de la entrevista, Enrique se refirió a su madre, la princesa Diana. Reconoció que “por muchos años” se negó a aceptar que había muerto y que creyó que “nunca” les haría eso o que “todo era parte de un plan”. “¿Realmente creías que ella había decidido desaparecer por un tiempo?”, le preguntaron, a lo que respondió: “Por un tiempo, y que luego nos llamaría y nos uniríamos a ella”. Incluso, dijo que su hermano tenía “pensamientos similares”.
Con respecto a las fotos del accidente que sufrió Diana en París, Enrique afirmó que lo que vio fue “la parte posterior de la cabeza” de su madre “desplomada en el asiento trasero”, a la vez que aseguró que las imágenes probaban que ella estaba en el auto accidentado en París.
Sin embargo, no miró todas las fotos, ya que su secretario privado y consejero le convenció de que no lo hiciera. “Había otras fotografías más horripilantes, pero le estaré eternamente agradecido por haber evitado que me infrinja dolor al ver eso. Porque ese es el tipo de cosas que se quedan grabadas para siempre”, expresó.
Por último, afirmó que para lidiar con el dolor probó sustancias alucinógenas, como ayahuasca, hongos y psilocibina. “Nunca recomendaría usarlas para recreación”, dijo y agregó que al “hacerlo con las personas adecuadas”, si se sufre una gran pérdida, dolor o trauma, estas sustancias pueden “funcionar como una medicina”. Sobre su propia experiencia, reconoció que le sirvieron para despejar “la miseria de la pérdida”. “Despejaron esta idea que tenía en mi cabeza de que necesitaba llorar para demostrarle a mi madre que la extrañaba. Cuando, en realidad, todo lo que ella quería es que yo fuese feliz”, concluyó.