También conocida como proyección astral o viaje astral, es una experiencia subjetiva en la que una persona percibe que está consciente fuera de su propio cuerpo físico. A menudo se describe como la sensación de “flotar” por encima del cuerpo, observar la escena desde una perspectiva diferente, o viajar a otros lugares. La persona siente que su “yo” o conciencia se ha separado del cuerpo físico y para muchos, la experiencia se siente increíblemente real y vívida, no como un sueño. La experiencia suele terminar con la sensación de “reingresar” al cuerpo, a menudo de forma abrupta. Hoy te traemos un increíble relato real sobre una experiencia del viaje astral.
“Logramos reanimar a una mujer con muerte clínica, cuando despertó me describió desde una perspectiva elevada cómo la reanimábamos, uno por uno: quién la masajeaba, quién intubaba, quién pasaba sangre, quién la operaba. Sabía todo”
Testimonio impactante del médico Manuel Sans que ha documentado y estudiado múltiples experiencias cercanas a la muerte.
“Aquel día yo estaba de jefe de guardia en urgencias del Hospital Universitario de Bellvitge. Nos trajeron a una chica en estado crítico; había sufrido un accidente gravísimo. Era una sanitaria del propio hospital, nos conocía a todos. Llegó en paro cardiorrespiratorio, sin pulso, sin reflejos, sin actividad cerebral. El diagnóstico inicial: muerte clínica. Estaba murta. Pero no nos rendimos. Tras casi 10 minutos de reanimación —con extrasístoles, maniobras, medicamentos, desfibrilador, sangre a presión y cirugía inmediata— logramos estabilizarla y, sorprendentemente, al cabo de una semana en coma… despertó. Sin una sola secuela.”
“Días después, con mucha delicadeza, fui a visitarla a solas. Le pregunté si había experimentado algo extraño, algo fuera de lo común desde que recuperó la conciencia. Su respuesta fue seca: ‘No quiero hablar de eso’. Y eso, créame, casi siempre indica que sí pasó algo. Tiempo después, cuando volví a preguntarle con más contexto, me dijo: ‘No me cuente nada. Yo lo vi todo’. Me describió desde una perspectiva elevada cómo la reanimábamos, uno por uno: quién la masajeaba, quién intubaba, quién pasaba sangre, quién la operaba. Sabía qué hacíamos en quirófanos contiguos, incluso en otras salas del hospital. Y no solo eso: me dijo que intentó tocarme, pero atravesó mi cuerpo y las paredes. Luego… luego me habló de lo inexplicable: seres de luz, una sensación de paz, de amor absoluto, de unidad con todo. Dijo que no quería regresar. Que aquí, en la Tierra, es donde está el calvario. Y allá, allá solo había armonía.”
Te dejamos el video con este relato y otros , del doctor Manuel Sans:
¿Cuándo Ocurren las Experiencias Extracorporales?
Las EEC pueden ocurrir en diversas circunstancias:
- Durante el Sueño o el Sueño Lúcido: Son más comunes cuando una persona está a punto de dormirse, despertarse, o en un estado de sueño lúcido.
- Parálisis del Sueño: A menudo se asocian con episodios de parálisis del sueño, donde la mente está despierta pero el cuerpo no puede moverse.
- Eventos Traumáticos o Cercanos a la Muerte: Algunas personas las reportan durante experiencias cercanas a la muerte, accidentes o momentos de estrés extremo.
- Meditación Profunda o Estados Alterados de Conciencia: Ciertas prácticas espirituales, meditación, o el uso de sustancias psicodélicas pueden inducirlas.
- Espontáneamente: Pueden ocurrir sin una causa aparente, incluso en personas que nunca las han buscado.
Aunque la ciencia no ha encontrado evidencia de que la conciencia pueda existir independientemente del cerebro, las experiencias extracorporales siguen siendo un fenómeno fascinante y profundamente significativo para quienes las experimentan.