El cantante Bob Dylan tiene a día de hoy 81 años y es una leyenda viva de la música. Mientras miles de seguidores le idolatran a lo largo y ancho del planeta, su historial personal no es tan intachable como su carrera profesional.
Dicen que todos tenemos una cara que ocultamos a los demás pero, siendo famoso, es difícil mantener la escondida y vivir al margen de la polémica. Ahora que es octogenario, Bob Dylan ha sido acusado de abuso de menores y es que la denuncia interpuesta en Nueva York le señala por algo que habría tenido lugar hace muchos años.
Corría 1965 cuando, según la denunciante, Bob Dylan le dio alcohol y drogas para abusar sexualmente de ella cuando era una niña de tan solo 12 años. El relato de la víctima, que ahora tiene 68 años, es espeluznante.
Robert Allen Zimmerman, el nombre real del cantautor, habría abusado de ella mediante drogas y amenazas de violencia física que, según el documento legal recogido por “20 Minutos”
e habrían causado daños a la víctima que le “perduran hasta la actualidad” a nivel psicológico y emocional. De hecho alega tener ansiedad y depresión permanente que no le dejan vivir una vida normal y plena.
Dylan, por su parte, lo niega todo mediante su manager que asegura a ‘Page Six’: “Estas acusaciones de 56 años de antigüedad no son verdaderas y serán defendidas vehementemente. La denuncia habla por sí sola”, sentencia.
Este escándalo que ya está en manos de los jueces neoyorquinos se suma a una vida de luces y sombras que también tienen tintes de violencia machista y ocultación. Bob Dylan ha estado casado dos veces, con Sara Lownds y con Carolyn Dennis.
La primera era modelo y le denunció por violencia machista. Estuvieron casados 12 años y es la madre de los cinco primeros hijos del artista. Sin embargo, una mañana como cualquier otra, Sara se levantó, entró a la cocina y vio a su marido con otra mujer, desayunando junto a sus hijos tras haber pasado la noche bajo el mismo techo.
No lo soportó. Sara demandó a Bob por violencia de doméstica y le acusó de varias infidelidades además de quitarle la custodia de sus hijos y recibirla ella por completo. Él siempre quiso volver pero ella no dio un paso atrás.
Tras todo el revuelo mediático que provocó esta ruptura, su segundo matrimonio fue bastante más discreto y de puertas para adentro… pero se pasó. Bob Dylan ocultó durante años a su esposa Carolyn y a su hija en común, Desiree. De hecho, la pequeña salió a la luz cuando ya tenía seis años y el mundo la conoció gracias a la biografía ‘Down the Highway’, que el cantante autorizó y que dejó boquiabiertos a sus seguidores y a la prensa por el tema de su hija oculta.
Cuando todos se enteraron, Dennis explicó a ‘People’ que: Bob y yo tomamos la decisión de mantener nuestro matrimonio como privado por una razón muy simple: dar a nuestra hija una infancia normal. Decir que Bob ‘escondió’ a su hija es malicioso y ridículo. Eso es algo que él nunca haría. Él ha sido un gran padre para Desiree”.
A lo largo de su vida, además de los vaivenes del corazón, Bob Dylan aseguró haber sido adicto a las drogas y, concretamente, a una de las más duras como es la heroína. Este delicado asunto se hizo público por culpa de la filtración de un audio en 2011, de una entrevista que él mismo realizó en 1966 y en la que aseguraba que se gastaba más de 20 euros al día en droga porque ya era un hábito para él.
Tres años después de aquella entrevista, en 1969, también dijo que ya había estado demasiado tiempo drogándose y que quería salir de este tipo de vida, charlando con la revista ‘Rolling Stone’. Sin embargo y a pesar de estas evidencias de su propia voz, allá por los ochenta aseguró a ese mismo medio que él jamás había probado la droga cosa que, obviamente, muchos jamás dieron por verdadera.
En lo profesional y paralelamente a su innegable éxito, Dylan también ha tenido polémicas relativamente actuales por venderse a la industria más comercial. Se supone que su rock es anticapitalista y, aún siendo una gran estrella, hay cosas que a sus fans no les sientan bien.
Sin ir más lejos hace siete años grabó un anuncio de Chrysler para emitirse en la Superbowl y sus seguidores no lo comprendieron. Pero su mayor polémica tuvo lugar 10 años antes, en 2004, cuando gravó un comercial rodeado de algunas de las modelos, los “ángeles” de la firma de lencería Victoria’s Secret… no le pegaba ni con cola.
Estos son algunos de los secretos y misterios de la caja de Pandora del aclamado compositor de Minnesota al que jamás le gustó hablar de sus padres y, de hecho, al inicio de su carrera y con solo 20 años, ya se declaró huérfano enterrándolos en vida o, al menos, eso ha intentado hacer creer a la prensa durante toda su vida aunque corren rumores de que la relación con sus padres es maravillosa y lo ha hecho precisamente para protegerles del acoso mediático.