Las imágenes de una madre de ocho que fue hallada encadenada por el cuello a un cobertizo en una zona rural de China han generado indignación dentro y fuera del país asiático.
El video, que fue compartido inicialmente en el llamado TikTok chino, Douyin, a finales de enero, muestra a la mujer con un collar de metal en el exterior de una casa sucia en Xuzhou, provincia de Jiangsu.
La madre, identificada como Xiao Huamei, solo viste un suéter a pesar del clima gélido en el condado Fengxian.
En una parte del video, el bloguero le entrega un abrigo a la mujer, que parece tener problemas de lenguaje.
Algunos cibernautas se preguntan si la mujer padece de sus facultades mentales, y si fue forzada a tener a sus hijos; uno nació recientemente.
Liu Ruishuang, subdirector del Departamento de Ética Médica y Leyes de Salud en la Universidad de Pekín, declaró que teme se trate de un caso de tráfico humano.
“El video es realmente demasiado aterrador. Todo el mundo está prestando atención porque no nos podemos imaginar en esta situación, y da bastante miedo”, planteó Ruishuang. “¿Será este el caso del que todos los días debemos temer de que también seamos víctimas de tráfico humano?”, expuso.
Las autoridades rechazaron que se trate de un caso de esta índole y sostuvieron, primero, que la mujer sufre esquizofrenia.
Oficiales locales luego dieron otras dos versiones: la primera indicando que los parientes de la mujer la mantenían cautiva solo cuando estaba inestable. Luego indicaron que la mujer había sido enviada por parientes a la zona rural para que se casara, pero que desapareció.
No está claro dónde se encuentra en estos momentos la mujer o si fue trasladada a algún centro de salud o de cuidado.