Una mujer de la ciudad de Worcester, en el estado de Massachusetts, fue detenida cuando se paró a pedir unos nuggets de pollo en un autoservicio de McDonald’s, en el transcurso de una persecución policial que se prolongó al menos por espacio de dos horas.
El pasado 6 de julio, agentes de la Policía de Worcester atendieron a un aviso sobre una camioneta robada que pertenecía a la compañía Raymond James Restoration Inc. Aunque los empleados de la compañía no presenciaron el robo, la responsable, identificada como Johanna Gardell, de 38 años, fue rastreada por el GPS del vehículo.
La mujer no obedeció cuando le ordenaron que parara la camioneta y logró huir de los agentes, saltándose luces rojas, conduciendo en sentido contrario y chocando contra varios vehículos.
Cuando un agente de Policía intentó parar a la mujer, Gardell lo atacó a golpes, por lo que el agente tuvo que ser trasladado al hospital.
La persecución tocó a su fin cuando Gardell decidió pedir comida en el autoservicio de McDonald’s, donde fue detenida por los agentes que le bloquearon el paso.
“Estaba pidiendo los nuggets de pollo y los empleados del local realmente le hicieron esperar”, dijo Raymond James Simoncini, el propietario de la camioneta. “Los agentes llamaron de antemano para que le hicieran esperar y ralentizaran la cola”, explicó.
Actualmente, la mujer se enfrenta a 15 cargos y comparecerá ante el tribunal el 13 de julio.