Un farmacéutico que chequeaba la presencia de sustancias extrañas antes del uso de la vacuna encontró varias partículas negras en un vial localizado en la prefectura de Kanagawa, según las autoridades. Unas 3,790 personas ya habían recibido las vacunas del lote, y el resto se ha suspendido.
Los medios de comunicación locales afirman que, hasta ahora, no hay pruebas de que la vacuna potencialmente contaminada haya provocado riesgos para la salud. El distribuidor nacional de la vacuna ha recogido el vial sospechoso de estar contaminado, y lo está investigando.
El incidente tiene lugar menos de una semana después de que Japón suspendiera el uso de más de 1.63 millones de dosis de Moderna debido a contaminación.