En la conservadora provincia de Indonesia de Aceh se llevó a cabo el azote a una mujer que confesó haber tenido relaciones sexuales con un hombre que no era su esposo.
De acuerdo con la agencia AP, la mujer recibió 100 latigazos, mientras que el hombre con el que mantuvo una relación extramarital sólo recibió 15 porque negó todo lo dicho por la mujer.
En Aceh, donde aún rige la ley islámica, cientos de personas se reunieron para ser testigos del castigo que la mujer recibió por ir en contra de las leyes de su país. Los curiosos no dudaron en sacar sus teléfonos celulares para retratar a la mujer e incluso grabar el momento y compartirlo en redes sociales.
De acuerdo con la misma agencia, por un momento la acusada no logró mantenerse de pie debido a los azotes y se desvaneció, pero tan pronto se puso nuevamente de pie siguieron los latigazos.
La mujer, de quien hasta ahora se desconoce su identidad, confesó a los investigadores el nombre del hombre con el que le fue infiel a su esposo, sin embargo, éste negó todo lo dicho por su amante y los jueces se vieron en un aprieto porque les costaba reconoces la culpabilidad del hombre, quien es jefe de la Agencia de pesa del este de Aceh, además de que también está casado.
Iván Najjar Alavi, jefe de los fiscales de la región, habló sobre el castigo público previsto por la ley islámica para estos casos: “Durante el juicio no admitió nada y negó todas las acusaciones. Por ello los jueces no pudieron probar su culpabilidad”.
Los azotes llegaron tres años después de que un grupo de personas los sorprendiera en pleno amorío en una plantación de aceite de palma; la mujer aceptó los señalamientos, mientras que el hombre negó todo, razón por la que solo fue reprendido con 15 latigazos.