Desde que se dio a conocer la situación legal que Laura Bozzo enfrenta en México y que hasta la FGR tuvo que solicitar una ficha roja a la Interpol para su localización, nadie tenía ninguna pista de dónde podría encontrarse la peruana.
Y para aquellos que tenían curiosidad de saber cómo y dónde se encontraba Laura luego de que fuera vinculada a proceso con prisión preventiva, por un delito fiscal que supera los $600,000 dólares, las cámaras de “Chisme No Like” así lograron captarla.
A pesar de la gravedad de su asunto, el programa conducido por Javier Ceriani y Elisa Beristain compartió imágenes de Bozzo disfrutando de Acapulco sin preocupación, ahora que se volvió a dar “luz verde” para que sea detenida.
Sin el mayor apuro fue captada comiendo tacos en las paradisíacas playas de este puerto, en el estado de Guerrero, donde tendría una residencia y estaba acompañada de tres mujeres en un lujoso restaurante.