La multinacional farmacéutica Merck, con sede en Nueva Jersey, anunció este viernes que desarrolló una píldora experimental antiviral para tratar el covid-19.
El medicamento, llamado “molnupiravir” y realizado en conjunto con Ridgeback Biotherapeutics, redujo el riesgo de hospitalización y muerte a casi la mitad en un ensayo clínico.
El estudio se detuvo antes de tiempo, tras la recomendación de una junta de expertos independientes que supervisó los ensayos, dados los resultados positivos que mostró el fármaco, por lo que la compañía adelantó que estaría solicitando a la FDA una autorización para su uso de emergencia en EEUU lo antes posible.
De aprobarse, este sería el primer tratamiento antiviral aprobado para tratar el covid-19 en EEUU.
Aunque la vacunación avanza en todo el país, con mandatos que en muchos casos se hacen efectivos a partir de este día 1, la campaña se ha tropezado con la resistencia de muchas personas que por distintos motivos y desinformación, rechazan la inmunización, por lo que contar con una pastilla para tratar el virus constituye un avance importante para luchar contra el covid-19 y que se ha echado en falta hasta el momento.
El mayor impacto del fármaco podría darse sobre todo en otros países que no tienen gran disponibilidad de vacunas.
Merck ha autorizado su medicamento a cinco fabricantes indios de medicamentos genéricos para acelerar su disponibilidad en países de ingresos bajos y medianos. Según la compañía, usarán un enfoque de precios escalonados, de acuerdo con la capacidad de los países para pagar por el fármaco.
“Se necesitan con urgencia más herramientas y tratamientos para combatir la pandemia de covid-19, que se ha convertido en una de las principales causas de muerte y continúa afectando profundamente a los pacientes, las familias y las sociedades, y ejerce presión sobre los sistemas de atención médica en todo el mundo”, escribió Merk en el comunicado conjunto de este viernes. “Con estos resultados convincentes, somos optimistas de que el molnupiravir puede convertirse en un medicamento importante como parte del esfuerzo mundial para combatir la pandemia y se sumará al legado único de Merck de presentar avances en enfermedades infecciosas cuando más se necesitan”, añadió la multinacional.
“Estamos muy alentados por los resultados del análisis intermedio y esperamos que el molnupiravir, si se autoriza para su uso, pueda tener un impacto profundo en el control de la pandemia. Nuestra asociación con Merck es fundamental para garantizar un acceso global rápido si se aprueba este medicamento, y agradecemos el esfuerzo de colaboración para alcanzar esta importante etapa de desarrollo”, dijo por su parte Wendy Holman, directora ejecutiva de Ridgeback Biotherapeutics.
Hasta el momento, la FDA aprobó el uso de un cóctel de anticuerpos monoclonales como un tratamiento que ha demostrado ser efectivo, pero a la vez muy costoso y difícil de fabricar y administrar.
Aunque los datos de Merck aún no se han publicado ni han sido revisados por pares, la farmecéutica ya ha comenzado a producir el “molnupiravir”, que tendrá forma de una cápsula marrón y deberá tomarse dos veces al día durante cinco días. El gobierno de EEUU ya hizo una compra anticipada de 1.7 millones de dosis a un costo de $1,200 millones.
La compañía especificó que el fármaco había demostrado su efectividad frente a las variantes Gamma, Delta y Mu.
Además de Merck, Pfizer y Atea Pharmaceuticals también están trabajando en un medicamento antiviral oral para tratar el covid-19.